Protesta en Bruselas contra la intervención de EEUU en Bolivia

Unas cien personas se reunieron frente a la embajada de EEUU en Bruselas el pasado viernes. La razón era protestar contra el papel que ha jugado EEUU en el reciente “golpe empresarial cívico” contra el gobierno de izquierdas en Bolivia. El descubrimiento de un nuevo complot militar en Venezuela para derrocar al presidente venezolano, Hugo Chávez, también fue objetivo de las protestas.

brussels-against-us-intervention-2.jpgUnas cien personas se reunieron frente a la embajada de EEUU en Bruselas el pasado viernes. La razón era protestar contra el papel que ha jugado EEUU en el reciente “golpe empresarial cívico” contra el gobierno de izquierdas en Bolivia. El descubrimiento de un nuevo complot militar en Venezuela para derrocar al presidente venezolano, Hugo Chávez, también fue objetivo de las protestas. En general también fue un acto de apoyo a las revoluciones de ambos países.

Manos Fuera de Venezuela de Bélgica hace unos diez días tomó la iniciativa de organizar un acto sobre Bolivia al que asistieron unas 30 personas. En el acto se tomó la decisión de convocar esta protesta frente a la embajada con la colaboración de otros grupos. Se lanzó un comité de solidaridad belga. Aparte de muchos latinos y activistas de izquierdas, en la concentración había un grupo de estudiantes de habla francesa de la universidad de ULB. El día antes, un grupo de activistas de MFV había ido al campus a distribuir panfletos. Para su sorpresa, el panfleto se podía ver en las paredes de distintos lugares de la facultad. Un grupo de estudiantes había tomado espontáneamente la iniciativa de organizar la propaganda. También participó el comité de acción local en solidaridad con “los sin papeles”, que acababa de organizar una manifestación masiva, y el grupo local de ATTAC.

La exitosa acción terminó con dos discursos militantes. Erik Demeester, de MFV, explicó como la derecha en Bolivia había intentado violentamente dar un golpe de estado. Temporalmente el peligro había retrocedido pero Evo Morales había propuesto una nueva ronda de negociaciones con la oposición de derechas. Las masas no confían en estas negociaciones han reaccionado con movilizaciones de masas y pedido armas para defenderse contra los ataques violentas de las bandas de extrema derecha. La oligarquía de Bolivia y Venezuela nunca se reconciliará con los gobiernos de izquierda. No descansará y utilizará todos los medios a su disposición para derrocar a estos gobiernos.

brussels-against-us-intervention-1.jpgMarcelo Estrada, miembro del MAS boliviano, habló después de Erik. Explicó a la audiencia que las nuevas negociaciones son un truco de la derecha para ganar tiempo y reagrupar sus fuerzas. Dijo que la oposición era fascista y racista, que no temía perpetrar asesinatos de masas como lo ocurrido con los campesinos del departamento de Pando. También criticó el sistema judicial boliviano por pretender liberar al prefecto de Pando, considerado como el cerebro detrás de los asesinatos de masas. Su discurso fue interrumpido, de manera amistosa, con la consigna: “El pueblo armado, jamás será aplastado”. Al final, Marcelo agradeció a todos su solidaridad.

Agradecimiento